Desde el mes de noviembre de 2018, coincidiendo con la petición de la Comunidad de Madrid al Ayuntamiento para que incluya el conjunto arquitectónico de Kodak como bien cultural a proteger, la propietaria (la constructora Levitt) ha retirado la vigilancia del conjunto.
A partir de ese momento el deterioro de la finca ha sido galopante. Después de la rotura de la valla perimetral, hubo numerosos accesos al edificio y a las naves, muchos de ellos vandálicos, que han deteriorado enormemente la construcción. Más tarde, la apertura de la puerta principal al complejo, ha facilitado el acceso al edificio con camiones y furgonetas que poco a poco van desmontando las partes que pueden ser objeto de venta de la edificación (sanitarios, cableados, partes metálicas, etc.).
Últimamente ya se han visto chatarreros reventando el tejado de las naves y costando distintas piezas en su interior. Estas actividades se llevan a cabo con total impunidad, a pesar de las llamadas de los vecinos y vecinas de la zona a la Policia Local y a la Guardia Civil.
Al tratarse de una propiedad privada, indican las fuerzas del orden, si el propietario no denuncia, no se puede hacer nada.
Ha habido también varias denuncias del Grupo Municipal Contigo por Las Rozas en el Pleno del Ayuntamiento para que sea el propio consistorio quien demande a la propietaria la vigilancia del conjunto. Parece que se han iniciado algunas gestiones que no han llegado a ningún fin y que se adivinan muy lentas para la rapidez con la que se está deteriorando el edificio.
Puedes ver una galería de fotografías y vídeos de la impunidad con la que actúan los vándalos y chatarreros y el estado en que se encuentra nuestro patrimonio.